¿Quién no ha oído en los últimos meses hablar de la nube? Actualmente vivimos en un mundo donde las nuevas tecnologías nos abordan cada vez más y su velocidad de aumentar se incrementa de manera vertiginosa a través de Internet. Sin embargo estas tecnologías cambian y lo que realmente se maneja ahora es el “Cloud Computing” pero, ¿para qué sirve realmente?
Según Wikipedia “en este tipo de computación todo lo que puede ofrecer un sistema informático se presenta como servicio de modo que los usuarios puedan acceder a los servicios disponibles “en la nube de internet” sin conocimientos (o, al menos sin ser expertos) en la gestión de recursos que usan.
Cloud es un modelo de despliegue y consumo eficiente y flexible de servicios de las Tecnologías de la Información, facilitado por la virtualización y la red de comunicaciones. Es un prototipo de oferta y consumo inspirado en servicios a través de Internet que está focalizado en un consumidor final.
Cloud representa la industrialización del despliegue de servicios soportados por las TI, además permite tener disponible modelos de autoservicio y pagos por uso, incluyendo ejemplos de contratación así como economías de escala. Entre sus características destaca: autoservicio y aprovisionamiento, acceso universal a la Red, compartición de recursos, elevada elasticidad y servicios mensurables.
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